[Cosas que me tocan la moral]

Hay cosas que me sacan de quicio.

Muchas críticas, muy poco respeto, y lo bien que lo pasamos criticando, ¿verdad?

Lo bien que lo pasamos creando polémica, criticando gustos ajenos y pretendiendo que respeten los nuestros.

Qué bien lo pasamos (como niños) diciendo que “estamos hartos de la mecánica repetitiva de los shonen, que los shonen son una mierda pinchada en un palo hecho de mierda”, “que los shonen son sólo luchas y más luchas”…

Coño, si lo que buscas en un shonen es algo profundo y trascendental que te lleve al Nirvana, mal vas amigo.

Es como comprarse un yaoi y luego quejarse de que sólo salen tíos haciéndose “mimitos”.

Un shonen es lo que es, luchas y combates y situaciones de chulería. Deja de quejarte y no los compres, más claro agua. Yo, por mi parte, seguiré disfrutando de mis shonen repetitivos. Sí, y mucho nos quejamos de ciertos shonen, pero hay otro cierto shonen al que no le llamamos repetitivo, cuando es el shonen más rayante y repetitivo de todos cuantos shonen repetitivos hay en el mercado (No diré nombres, pero quizá os hagáis una idea.)

Yo, señores y señoras, lo que busco en un manga, es entretenimiento.No busco la verdad absoluta de la vida, ni la razón de mi existencia. Busco reír, emocionarme, quizá soltar una lagrimita. Y si encima un manga me hace reflexionar, pues cojonudo, leches. Qué bien que he comprado un manga que me hace usar mi materia gris.

Mientras tanto, dejadme emocionarme con la chulería de los personajes de Reborn.

Dejadme disfrutar de los combates de Bleach.

Dejadme reflexionar sobre la sociedad actual con Astral Project.

Dejadme meterme en el melodrama familiar de Hot Gimmick.

Dejadme reír con las locuras de Kaizo.

Dejadme flipar con las técnicas fantasmada de Echizen.

Lo cual me lleva a otro punto. Muchos se refugian en sus “mangas clásicos” como si éstos fueran la gran panacea y la solución a toda la mierda que dicen que se publica hoy día. En mi opinión, los mangas “clásicos” están sobrevalorados. No me malinterpretéis, son obras excelentes y los orígenes de nuestra afición, pero ni todos son buenísimos ni hay que refugiarse sólo en eso. Hay mangas clásicos penosos, igual que hay mangas hoy día penosos. Pero eso es y será así siempre, hasta el fin de los días.

Y los que van de “yo soy superchachi porque sólo leo mangas antiguos y los actuales los rechazo porque son todos basura aunque no los he leído”, o de” seguid leyendo la mierda actual mientras yo me deleito con un gran argumento con dibujo pésimo”. Sinceramente, no hay que ser extremistas, la virtud está en el medio, como decía Aristóteles.

Gente, me gusta la “mierda” actual (sacrificadme al Señor, oh, pobre de mí), me gustan algunos mangas clásicos, y no por ello me voy metiendo con todo aquel que, oh señor que afrenta, se compra un tomo de Bleach, o uno de Reborn!. Me hacen disfrutar, es todo lo que pido a un manga.

Mientras tanto, algunos de vosotros seguiréis buscando el gran orgasmo en un manga, un método de entretenimiento y expresión.

¿No deberíamos dejar de criticar y respetar los gustos ajenos? Todos formamos parte de una misma comunidad (la comunidad otaku), y ya son suficientes las pullas que nos llegan de fuera como para que también nos echemos pullas entre nosotros. Entonces apaga y vámonos.

Lo siento, pero tenía que decir todo esto. Hay cosas que simplemente no soporto. Y aquí he mencionado algunas de ellas. Gracias por leer todo (me ha quedado largo de caray xd).

Espero vuestras propias opiniones.

Muchas gracias.